
…y ves cómo y cuánto han crecido desde que se conocieron, los ves felices, sonrientes, disfrutones, riéndose con todo el mundo, con alguna lágrima de ilusión que se escapa de entre sus ojos, mirando hacia todas direcciones, bailando, abrazando a gente, besando a gente, escuchando canciones dedicadas, entregando regalitos, descubriendo lunas de miel, emocionándose al pensar todo lo que les espera, tomando en brazos a su niño, escuchando historias del pasado, contando anécdotas familiares, bebiendo champán, comiendo dulces y pasteles, recibiendo a los nuevos posibles, despidiendo a los mayores ya arraigados, esperando una cama recién hecha, iluminados por el sol primero y por la luna más tarde, nerviosos, exhaustos, felices… Recién casados.
5 comentarios:
Dios mio¡¡¡ si conoces a esa pareja de tu relato y aún están a tiempo debes como sea de persuadirlos.... recien casados¡¡... Se les abren las prespectivas del reino vegetal; una pareja de zombies;una par de lechugas; vagar en estado de letargo embadurnados en los lodos de la rutina. Si los conoces y los quieres deebs impedirlo;ja,ja,ja
Eremita ¿lo has probado? ¿o hablas por boca de otros?
Len...sencillamente...precioso!!!
...querido eremita, más quisieras tú verte de esa guisa. Aprende a apreciar el amor de los demás y aunque no quieras seguir el ejemplo al menos trata, como hago yo, de percibir la alegría que desprenden y pueden transmitirte, empapate de ella y luego... aplicatela a ti mismo. La rutina, el letargo, la fatiga ya vendrán o quizás no
...¿algun día lo sabrás? :P
Como observo que el comentario por lacerante
provoca irritación desesperante,
sigo con el asunto y modificando mi talante
Ahora desde otra perspectiva
entonando a modo de misiva
una llamada al amor galante
hilvano unas letras con cierto recato,
para que la pareja aludida en tu relato
siga ciega en su historia de amor nato:
Es cierto que hay corazones que el temporal acaba destrozando, haciendo que esos mismos dedos de caricias sutiles que caían a la piel como rocio al pasto, sean ahora vientos de erosión sin desenfreno; y entonces “podemos escribir los versos más tristes esta noche”.
Pero a pesar de todo, siempre “habrá almas a quien todo un Dios prisión han sido, venas que humor a tanto fuego han dado, médulas que han gloriosamente ardido, su cuerpo dejarán no su cuidado, serán ceniza, más tendrán sentido...”
Se puede creer en el amor.... sin estar casado, aunque a veces ese amor persiste pese a estarlo.
Más no es el casamiento lo que determina , por tanto el grado amatorio,
sino más bien un sentimiento sincero
nacido en el alma y a veces transitorio.
Publicar un comentario